Convocada en Graus la cuarta edición del Campeonato de Piedras en Equilibrio

El presidente de la Asociación Ramiro I, Ángel Aventín, ha anunciado la convocatoria de la cuarta edición del Campeonato de Piedras en Equilibrio, una cita singular ya que es única en su género en España y que en esta ocasión se celebrará en Graus el próximo domingo 28 de julio. El certamen contará en esta edición con el padrinazgo de Pedro Durán, un destacadísimo experto en este singular arte con el que se gana –y muy bien- la vida con sus demostraciones por todo el mundo y sus sorprendentes videos colgados en Internet, que realizará diversas demostraciones ese fin de semana en Graus.
La entidad convocante espera la presencia de entre setenta y ochenta participantes en alguna de las dos modalidades –niños menores de 12 años y adultos- que ya han abierto el período de inscripciones que permanecerá vigente hasta el mismo día de esta competición que, como recuerda Aventín, «consiste en levantar con cantos rodados de río bellas figuras en equilibrio sin más sujeción que la fuerza de la gravedad, cada una con su propia personalidad, en una muestra palmaria de arte efímero».
El campeonato se desarrollará entre las 10 y las 12 de la mañana, en la margen izquierda del río Ésera, a la altura del Puente del Hotel Lleida de Graus. Previamente, desde el día 22 al 26, la Asociación Ramiro I organizará diversos talleres para promocionar esta disciplina que cuenta con un cada vez mayor número de adeptos.
Como en sus tres anteriores convocatorias, el Campeonato aspira a difundir y popularizar una afición que tiene una evidente capacidad para que sus practicantes profundicen en la introspección personal y cuenta con indudable poder de fomentar su relajación y concentración.
La convocatoria mantiene las mismas características que su edición de 2019: tiene carácter totalmente abierto y cada uno de los participantes podrá concursar con dos obras -«polilitos» las han bautizado los organizadores del certamen- o esculturas efímeras en este concurso en el que se valorará tanto que los participantes acumulen el mayor número posible de piedras en equilibrio sin ningún tipo de argamasa o sujeción como, también y sobre todo, que coloquen las precisas para conseguir una composición lo más armónica posible.
Aventín explica que el elemento «fundamental» en el equilibrio es encontrar una especie de “trípode” para asentar la piedra. «Cada piedra está cubierta de pequeñas indentaciones que actúan como base para la siguiente piedra», señala el presidente de la asociación convocante del campeonato para quien estos polilitos son «símbolos de tranquilidad y armonía».
Entre los objetivos que se persiguen con esta curiosa competición están los de acercar las corrientes de agua a los ciudadanos y ayudar así a concienciarlos sobre su papel ecológico. También para ayudar a un mayor conocimiento de las riberas que redunde, en el caso específico de Graus, en la realización de acciones medioambientales de recuperación de senderos fluviales y sotos promoviendo los trabajos de voluntariado e implicando a las administraciones más cercanas.

Fuente: Ganas de Vivir